Cuando estaba en el cole se me ocurrió ir por primera vez a un cine porno gay. Fue un día sábado que estaba solo en casa, aburrido, me puse una tanguita negra con rojo que hacia resaltar mis nalgas redonditas y paraditas, unos viejos jeans y playera bien pegaditos haciendo resaltar mi cuerpo juvenil y delgado. Me maquillé los cachetes y bigotes para aparentar mas edad, los ojos para verme mas lindo y un toque de mas color y brillo en los labios
Llegué al cine con el firme propósito de tener sexo, una buena verga y leche en mi boca y porque no, en mi culito también si tuviera suerte. El chico de la caja me preguntó, tienes 18?, claro que si 20, le contesté en mi voz mas baja que pude emitir y me dio el billete. Entré excitado y adentro me di cuenta de la cantidad de hombres bien dotados que había en el foyer, caminé entre ellos meneando mi colita, lamiéndome los labios, mirando sus bultos, sonriéndoles a los que me veían la cara y entré a la oscuridad del cine.
Vi en pantalla gigante como un papi se follaba a un nene como yo, que a su vez se mamaba a otro papi. Era alucinante ver aquello, de repente un hombre me agarra por el brazo y me dice “vente conmigo mariconcito, estas muy lindo”, lo que hizo que mi corazón latiera a mil y sintiera una adrenalina que no se explicar pero es maravillosa. Me dejé llevar por el hombre que me seguía susurrando cosas morbosas en mi oreja, pegando su verga dura a mi nalgas todo el tiempo, diciéndome como iba yo a gozar con él. Me llevó a una butaca pegada a la pared, me sentó y se quedó parado a mi lado, abrió el cierre de sus jeans y me dijo “sácamela marica”. Yo me emocioné mas y no dude en meter mano en sus pants y sacársela.
Me fue difícil, pues estaba bien dura, era grande y gruesa, no como las de los chicos del liceo, le corrí el prepucio y en la oscuridad aprecié un glande grande, cabeza de hongo, rojito, bien mojado y destilando pre semen, mi mano temblaba de emoción cuando lo traje a mis labios y le di un besito suave en la punta y le lamí un poco de liquido. Yo ya era experto mamando verga a mis compañeros del liceo. Seguí besándole la cabezota y lamiendo cada vez mas pre semen, le dije que rico estaba y seguí ahora comiéndole el prepucio. El hombre gemía de placer, lo que me excitaba mas y aseguraba que se lo estaba haciendo bien.
Yo seguía disfrutando de la pantalla grande y de vez en cuando volteaba mi mirada hacia arriba sonriéndole al macho y alabando su herramienta. De repente volteo al otro lado y veo unas caras embelesadas de hombres casi pegadas a la mía viéndome mamar y disfrutando aquello. Volteo hacia abajo y los veo masturbándose unos solos y otros él uno al otro. Así estuve un rato hasta que el hombre se sentó a mi lado y yo me puse de rodillas para mamárselo mejor, el fue metiendo su mano dentro de mis jeans y al sentir mis nalgas con la tanga puesta me susurro “ay putita que buena estas” esto me calentó mas y me baje el pants hasta mis rodillas y parando mi culito que ya tenia uno de sus dedos dentro sobándomelo y los otros tres tipos detrás queriendo participar.
El hombre ni tonto les dijo son $15 para que se las mamé o se lo cojan. En esto el me dice que estaba a punto de venirse pero quería primero probar mi culo, le pregunté que si tenia condón y me sacó uno, lo abrí y se lo puse, era de los pre lubricados así que solo le puse mas saliva babeada de su pre semen y me voltee. “Empínate putito” me ordenó y yo excitado abrí mis piernas lo que pude entre las butacas y me empiné. Primero pasó su lengua por mi culo varias veces, ese es otro gran placer que no se puede explicar, es de lo mas rico que te mamen el culo, se siente la gloria, y fue entonces con la calentura al mil y empinado que con mi mano tome otra verga de uno de los mirones y la lleve directamente a mi boca, era tan grande el placer que sentía, que yo mismo le pedí a mi macho que ya me metiera su verga y así lo hizo. El cobró los $15 pesos y me dio $10.
Les diré que fue algo maravilloso gozar y gozar hasta que se vino el tipo que se la estaba mamando. Me gustó sentir su leche espesa y amargosa, me la tragué y no dejé ni rastro. Así seguí disfrutando de la verga que tenia en el culo pero ya cerrando mis ojos y bramando como una perra hasta que lo sentí estremecerse y se vino en mi. La sorpresa que se llevo mi cogedor fue cuando le quité el condón y me trague su leche a lo que el me dijo “que gran puta eres” sin pensar o imaginar que era la primera vez que yo hacia eso.
“Vengan cabrones quien es el próximo en cogerse la putita” La pareja de hombres le dio los $30 y se pusieron uno a darme la verga por la boca y el otro detrás de mi a cogerme con condón.
Igual me tomé la leche de los dos, cada una sabia algo distinta, pero las disfruté. Ellos se besaban mientras me cogían y yo alucinado con el éxito que tenia en el cine con hombres. Vinieron mas, mi macho cobraba y se quedaba con su parte. Estuve como tres horas en esto, ya la boca me dolía y el culito también, lo tenia demasiado sensible de tanta verga cogiéndome. Así que satisfecho de haber cumplido mi fantasía decidí retirarme. Tenia como $300, demasiado bueno para una tarde, que ya sabia iba a repetir pronto, pues la tentación del placer y el dinero era demasiado buena. Salí directo a la parada del bus, ya era oscuro.
Hube que esperar largo para que pasara un bus. Vino un jovencito a mi lado, y se dio cuenta de lo que había hecho. Me miró y me dijo “coño chamo hueles a semen, estuviste mamando?” sin pena le dije “si y culeando también en el cine porno aquel” “no mames pana y gozaste?” “demasiado bueno y las pelis también” “eres marica” “si, me gustan los hombres” “Y no me la mamas a mi?” “Donde?” “ en mi casa, estoy solo este fin” Me estaba gustando el chavito, era como de mi edad y además virgen de todo, así que le dije “vamos” llegó el bus, nos montamos, sentamos juntos y seguimos conversando.
Vean mi proximo relato para saber que hicimos los dos en su casa. Bueno espero sus votos y comentarios si les gusto este y si quieren que siga!