Era un chico virgen hasta el día en que le hize el comentario a una prima mía, en el cumpleaños de mi mamá.
Todos estábamos preparando las cosas para la fiesta, hasta que decidimos ir a cambiarnos porque estábamos sudados. Así que solo fuimos mi prima y yo al cuarto. Cuando nos cambiábamos, la orquesta hizo su aparición y la gente hizo caso omiso a lo que estaba sucediendo. Así que mi prima se cambió delante de mí y recuerdo que llevaba puesta una pantaleta blanca con agujeros, lógico!! Al verla tuve una erección, de la cual ella se percató (puesto que mi miembro es de considerable tamaño), así que me preguntó que si alguna vez había follado con alguien y le dije que nunca, me dijo que qué me parecía si lo intentásemos en ese instante y le dije: «Pero y la fiesta???» y me dijo que no fuera bobo que nadie se daría cuenta, así que me bajó los pantalones y empezó a besarme por todas partes hasta que llegó a mi pene, en ese instante se detuvo y sacó de su cartera un embase pequeño, no sabía con exactitud que era, lo cierto del caso fué que me lo untó por mi polla con suma suavidad y al esparcirlo todo, se lo metió en la boca y empezó a deborármelo con suavidad, arriba y abajo, se lo sacaba de la boca y le pasaba la lengua por un lado, al mismo tiempo que me hacía la paja, era la mamada del siglo!!!! Cuando me iba a correr, le dije que quería metérselo con rabia y aceptó!
Me puso esas dos hermosuras que tenía de senos, en la cara y agarró mi miembro y se lo introdujo suavemente por su coño… No dejaba que me moviera y rapidamente cabalgaba sobre mí, con movimientos ondulatorios! WOW! estuvimos así como 15 minutos hasta que me corrí en su vientre y ella gemía de la excitación, sólo puedo recordar su cálida voz diciendo: «Que rico haaaa » una y otra vez… Perdimos la noción del tiempo…ya había pasado como una hora, así que decidimos vestirnos y volver a la fiesta. Desde entonces lo hago con ella cada vez que se me antoja y cada vez experimentamos nuevas posiciones…
