Mañana del día 16 de Mayo de 1997. Mis padres murieron en un accidente de coche. Aunque creen que no lo sé, todo ocurrió cuando iban tocándose y besándose, mi padre se salió de la carretera cayendo por el desfiladero de Despeñaderos. Todo este tiempo he estado viviendo con mi abuela, pero esta ya es muy mayor y le ha pedido a su otra hija Silvia, que se hiciese cargo de mí. Llegué al encuentro con mis tíos, apenas los conocía ya que no los había visto desde que era pequeño. Al llegar a la estación, la primera que me recibe es mi tía Silvia, que me abraza efusivamente. Luego me abraza y besa mi prima Sandra. Me quedo prendado de las dos bellezas, en ese momento aparece mi tío Ramón, que me abraza y estruja. Un sargento del ejército que es un auténtico animal (miro a mi tía y pienso como pudo casarse con él).
Montamos en el coche, Sandra y Yo atrás, durante el camino, observo a mi prima de arriba a bajo, es delgada, un cuerpecito delicado, unos pechos voluptuosos y firmes, pelo negro como el azabache y muy largo, cara redondita, su ropa es moderna y muy sexy, un top marcando pecho y enseñando la barriguita y unos jeans ajustados al culito, mostrándolo redondito y respingón. Es una auténtica monada de 16 años. Por otro lado mi tía, una mujer madura, 33 años, pero super sexy y morbosa. Al igual que su hija, su pelo es negro azabache y largo, pero en este caso rizado, cara simpática y de facciones perfectas. Pechos grandes, redondos y firmes, a pesar de su edad. Un cuerpo redondeado, no tan delgada como su hija, más jamona, un culo redondo y grande, un auténtico bombón.
Llegamos a la casa, un chaletcito a las afueras de Madrid, en Villalba, cerca del cuartel donde está destinado mi tío, el cuartel de Ingenieros Nº 21 de Zarcos del Valle (El Pardo). La vivienda es magnífica, grande, con piscina y todo. Al abrir la puerta salta sobre nosotros un perro que parecía un caballo, que responde al nombre de «Terminator». Mi prima lo abraza y acaricia. Una vez dentro, me indican donde está mi habitación, justo al lado que la de mi prima. Todavía es temprano, por lo que me dedico a pasear por la casa para conocerla mejor. Descubro que el desván está justo encima del dormitorio de mis tíos y que hay un agujero tapado con un corcho que coincide con el lugar donde está la cama. Tras este satisfactorio descubrimiento, voy a la piscina y veo que el seto deja entrever la vivienda vecina, donde tiempo después me entero, viven un matrimonio con dos hijos de 12 y 14 años.
Esa misma noche y ya en mi habitación, oigo ladridos y risas, me levanto y veo luz en la habitación de mi prima, la puerta estaba cerrada, recuerdo que las terrazas estaban separadas por un muro muy bajo y corro hacia allí. Me asomo por la terraza y a través de la cortina a medio correr de la habitación de mi prima, veo como está jugueteando con el perro, todo parece normal, pero de pronto ella agarra la polla del animal, que ladra de gusto. Increíble, mi prima se monta con el perro. La escena continua, no contenta con la rigidez y erección del miembro, lo frota con fuerza para que crezca más. El perro está muy alterado y nervioso, se sube encima de la chica una y otra vez, frotando su polla contra ella, a lo que ésta ríe. En un momento dado, ella se pone debajo del animal con la boca justo en su miembro y empieza a chuparlo. Lo lame y succiona con ansia, el animal suelta un fuerte chorro de semen en su rostro que la chica recibe con agrado. Tras esto el perro comienza a lamerle la cara, pasando la lengua por todas las zonas donde había semen. Entonces ella se frota el chocho y comienza abrírselo con dos dedos, pasando el morro del perro hacia él, éste comienza a chupar y lamer provocando unos gemidos y gritos de placer en mi prima que nunca antes había visto. Cuando todo esto terminó corrí de nuevo a mi habitación y me dormí pensando en lo ocurrido y en los días tan felices y divertidos que iba a pasar.
Mañana del día 17 de Mayo de 1997. Ya a amanecido, me levanto, voy hacia el servicio y veo la puerta entre abierta de la habitación de mi prima, ella está tumbada medio desnuda tan solo lleva unas minúsculas braguetas, la observo durante un tiempo y vuelvo a pensar que es preciosa, voy a tocarle uno de sus sonrosados pezoncillos cuando escucho un grito, de un salto me meto debajo de su cama y permanezco a la escucha. Mi tía entra a despertarla, entonces Sandra se levanta y va hacia el baño. Mi tía también sale de la habitación y es el momento que aprovecho para salir, saltando por la terraza a mi cuarto. Bajamos a desayunar, mi tía Silvia me presenta a Mónica, la criada, una mulata de 20 años y de armas tomar, durante el desayuno y de una forma sutil sonsacó a mi tía Silvia (sí Mónica vive en la casa, la respuesta es negativa. Sólo viene por la mañana y se va por la noche). Paso la mañana en mi habitación colocando un poco mi equipaje. Ya por la tarde Sandra decide darse un chapuzón en la piscina. Yo, claro está, no podía dejar pasar la oportunidad de verla en bikini, por lo que decidí ya que desde mi habitación y tras muchos intentos no la veía, ir a la habitación de mis tíos que daba directamente a la piscina. Una vez allí, observé atentamente a esa diosa, que cuerpazo!!!!. Pero de pronto oigo que alguien viene, con rapidez, me escondo tras un biombo de color rosáceo que había al lado de la ventana. Resultó ser Mónica, me mantuve escondido mirando. Ella se dirigió hacia el armario y puesto que mi tía había ido a la casa de los vecinos, mi tío en el cuartel y Sandra estaba en la piscina, comenzó a probarse unos vestidos de mi tía. Cual fué mi asombro al ver que al quitarse su uniforme de doncella, no llevaba ropa interior, dejando al descubierto un cuerpo precioso. Continuará.