Hola me gustaría decir de primero que el sexo y el experimentar cosas nuevas es algo que todos debemos disfrutar porque está en nosotros y es muy humano, siempre y cuando esto cause placer y satisfacción en todos. Hace tiempo que vengo con ganas de contar lo que me paso hace algunos años atrás y que cambio mi vida por completo. Bueno yo soy de Costa Rica y vivo solo con una tía que ya está algo viejita la cual cuido después de que murió su esposo. La casita queda en una calle de piedra que nace de una pista a unos 200 metros y el lote es grande, de hecho es puro campo con una montaña atrás, un potrero en frente y una quebrada que cruza el lote, así que decidí cuando me mude conseguirme un perro para que cuidara la casa por las noches. Me lo regalo un amigo del barrio y era un casisagua mescla de pastor alemán con quien sabe que raza de perro de tamaño mediano porque él no se hizo grande, se quedó mediano pero bonito, peludo y casi del mismo color del pastor. Mi tía le puso de nombre ¨Oso ¨no se ni porque y así se quedó. La casa era de dos pisos y arriba era donde estaban los cuartos pero la sala, la cocina, cuarto pilas y comedor quedaban abajo así que yo cuando llegaba de trabajar en la noche le echaba comida a Oso y me quedaba un rato con el acariciándolo y jugando un rato para que se des estresara (igual me servía para des estresarme a mí también), en la sala viendo tele o usando el internet en la computadora. Yo siempre he sido un hombre pervertido sexualmente y desde adolecente ya venía con actitudes bisexuales, una vez tres amigos y yo nos fuimos detrás de un cañal y nos enseñamos los penes solo por ver quien lo tenía más grande, además me gustaba tocarme y meterme el dedo en el culito, bueno no se me atraían las cosas diferentes en el sexo y cuando comencé a ver pornografía por internet y revistas me volví peor. Me gustaba penetrarme con cosas cada vez más grandes, y me daba cada vez más ganas de que un buen pene me volviera loco, era de lo más pervertido. Un día de esos navegando me encontré con un video de zoofilia donde una nena era penetrada por un perro negro y eso me llamo la atención. Seguí viendo videos y buscando más info en foros y páginas y me gusto, además siempre me han atraído los animales de una manera más cariñosa. Con ganas de que me penetraran y después de haber visto lo que un buen perrito puede dar de amor comencé a pensar en hacer el amor con Oso, pero me daba un toque de asco y me sentía un poco pecaminoso asi que me fui a tomar guaro a un bar cerca de la casa para que se me quitara la vergüenza, yo ya cuando lo bañaba lo masturbaba o cuando jugábamos lo tocaba por todas partes en especial en el forrito del pene y a el le parecía gustar un montón pero no me atrevía a dar el paso hasta que me pegue la fiesta de mi vida. Comencé a tomar después del brete y como a las 11pm me fui para la casa , ya mi tía estaba durmiendo y Oso me recibió contento como siempre asi que me lo lleve para adentro a la sala y me senté para anclarme un rato de la borrachera que me andaba. Oso se sentó a la par mía y empezó a chuparse el forrito hasta que se le salió la puntita roja un poquito. Yo me quede mirando y puse mi mano en el forrito y lo masajee para arriba y para abajo hasta que comenzó a sacar la punta roja y Oso no muy perezoso se puse de pie y comenzó a hacer movimientos de esos como queriendo penetrar a su perrita caliente, a su zorra y dejarle todo su amor dentro de cada embestida. Yo me asuste al principio porque pensé que no le gusto pero era al contrario estaba contentísimo y se me tiro encima ya haciéndome el sexo, que lindo mi perrito, Oso era muy caliente sexualmente hablando y como nunca había tenido sexo con una perra ( de su propia especie) tenia un montón de energía sexual acumulada. Como estaba para un lado y para otro lo agarre y lo acosté panza arriba como cuando le acariciaba la panza y lo relaje lentamente, pasando mi mano hasta su forrito y lo masturbe hasta que saco todo el pene pero sin hacer embestidas, era todo rojo lleno como de unas venas delgadas por todas partes y echaba chorritos pequeños de semen pequeños, en la punta tenia como una puntita alargadita por donde tiraba los chorritos. Pero yo no la veía tan gruesa como en los videos ni hinchada. Tenia rato de estar pensando en metérmela a la boca y entre el medio asco y la curiosidad me atreví a hacerlo. Sentí un sabor salado pero como a cloro también y cada ves me gustaba mas y entre mas le hacia el oral a Oso mas hinchado se le ponía el pene .Yo me le pegue un buen rato de lo bien que sentía y las ganas que tenía de comerme ese pedazo de carne hace tiempo. Oso jadeaba y jadeaba del gusto y de pronto se puso de pie como a los 15minutos de estarle yo chupando el pene. Me admire al ver que cuando me lo saque de la boca tenia una pelota que era como los testículos pero yo sabia que era el nudo que se les hace lleno de lechita calentita y es cuando están muy excitados y contentos. La punta suavecita se había hecho mas plana y los chorritos de semen eran mas rápidos pero igual de una manera intermitente. Me quite toda la ropa lo mas rápido que pude y me lubrique mientras me metía los dedos en mi culito,luego me puse de rodillas metí la cabeza debajo de Oso y seguí mamando aquel pene rojo lleno de semen mientras Oso debes en cuando me chupaba el culo ya muy lubricado con aceite anal que mande a traer por internet para cuando practicaba con objetos . Eso me trajo una idea en ese momento, deje de hacerle sexo oral al perro y me fui a la cocina agarre un pepino que había en la refrigeradora, le pude un condón y subi a Oso al sillón y lo acomode de lado, yo me senté encima del pepino mientras tomaba el pene de Oso una mano y lo masturbaba y me lo metia a la boca mientras cabalgaba encima de aquel delicioso pepino. Era lo que yo siempre había querido, buen sexo, un amigo fiel y nadie hablaría del asunto. Se me venían a la mente muchas poses que quería hacer con el perro mientras me dilataba el culito con el pepino. Me atrevi a hacer otra, me acosté en el sillón y me meti el pepino , como estaba boca arriba puse a Oso al revés de mi y mientras le seguía mamando el pene y recibiendo chorritos de su amor, el me chupaba la punta de mi pene y los lados apretados de mi culito por el pepino el cual por mis movimientos de cadera salía y entraba excitándome cada ves mas. Al rato de estar en eso Oso se puso algo inquieto y se tiro al suelo., yo estaba tan ebrio que me quede ahí un rato, El perro daba vueltas feliz y su pene se hizo pequeño hasta quedar de nuevo cubierto por el forrito de pelos. Me saque el pepino y quería llegar hasta el final de esto con Oso pero jamas me habían penetrado y me nos un perro, asi que no sabia como empezar. Se me vino a la mente de cuatro patas como es normal entonces me puse en el centro de la sala de cuatro patas sacando trasero y Oso solito como entendiendo lo que pasaba se me tiro encima de inmediato y con sus deliciosos movimientos pélvicos pasaba su pene por todo mi culito rápidamente buscando el escondite que le iba a dar su máximo placer y anhelo. Sentía como los pequeños chorritos se semen caliente mojaban mis nalgas y mi ano has ta que me dio la cabeza y con mi mano guie su pene hasta el centro del placer. Me la metio varias veces pero se bajo y comenzó a lamerme el culito y eso la verdad es una de las cosas en sexo que descubrí que me gustan mas. Después de una mamada de culito intento otra ves montarme y me penetro pero rápidamente se bajaba y volvia a lamerme mi culito dilatado y ahora todo mojado en semen de perro. Asi que me fui para el sillón y en posición de misionero le agarre las patas de adelante para que pudiera penetrar profundo y cuando por fin logro meterla bien fue lo mas maravilloso que sentí, cada ves mas fuerte en cada embestida, repetidos movimientos pélvicos hacían que se pusiera mas gruesa y el lubricante caliente hacia que cada penetración se sintiera muy placentera. Era la primera vez que tenia sexo anal y oral y fue CON UN PERRO…pero la verdad a mi me parecía como si lo hubiese hecho de toda la vida, me sentía cómodo, y sentía que podía complacer y hacer muy feliz a Oso y a otros perros. Repetimos una vez mas la acción después de que se bajara y me chupara con su lengua muy húmeda por todas mis nalgas y culito. Pero veía que no se abotonaba mucho y además de que no me penetraba con todo el pene y dejaba el nudo afuera. Me confié y pensé que era que no podía meterla y no le tome nota al asunto. Lo coloque encima del sillón he igual que la primera vez me senté a cabalgar en el pepino mientras trataba de hacerle de nuevo sexo oral pero como que no se ponía bien duro, si le gustaba mucho pero como que estaba raro, como insatisfecho por no poder llegar hasta el final y liberar la presa de semen de perro calentito en las primeras embestidas, asi que me lubrique de nuevo y me puse de rodillas junto al sillón me incline y apoyé el resto del cuerpo y mi cabeza en el mismo y dándome nalgadas le insinué que me montara. Me dio unos cuantos lenguazos en el orto y se subió, y como con un calculo perfecto me clavo su pene y comenzó a embestir pero esta ves mas fuerte que en la posición del misionero asi que tuve que agarrarle una de sus patas traseras con mi brazo para que no parara de penetrar como lo hacía de bien, después de semejante follada , se quedo encima y esta ves no quiso bajarse. Sabia que Oso me descargo su esperma dentro y eso no lo podía creer, duramos unos 10 o 15 minutos pegados , yo no quería ni moverme de lo rico pero al Oso moverse un poco pensé que se quería bajar asi que cuando meti mi mano para impedir que su pene se saliera note que la bola o nudo no estaba, me lo había metido en la fuerte penetrada y no me había dado cuenta, se que esto los hace muy felices porque ellos donde mas sienten placer es en los nervios que están en el nudo. Como era inexperto lógico me dio miedo por que pensé que algo me podía pasar asi que lentamente saque primero un lado del nudo y luego el otro hasta que solo quedo la gorda y larga polla de Oso dentro de mi, El perro saco el resto solo dejando un gran chorro y poso de semen dentro y fuera de mi. Quede un gran rato tirado en el piso muy excitado y meditando en lo que había hecho. Lo que mas miedo me daba era que me había gustado mucho y n lo pensé dos veces para hacerlo. Después de eso Oso y yo Comenzamos a tener sexo al principio una vez a la semana , luego tres y después a diario, era toda una adicción cada noche, cada trago de alcohol, cada sesión de sexo oral, cada descarga de Oso en mi boca o en mi culo, cada penetración anal. ..Hasta que un dia mi tia soltó a Oso en la tarde y un estúpido en carro atropello a Oso y cuando llegue estaba muerto. Me sentí muy triste porque la verdad teníamos una conexión especial y nos encantaba el sexo juntos pero no podía hacer nada. Desde eso he tenido ganas de volver a tener otro perro y de volver a ser su amante, su perrita sumisa, y de hecho he pensado en fantasías como tener mas bien dos y mientras uno me penetra chupársela al otro o meterme los dos penes en la boca al mismo tiempo., un dia fui a la casa de un amigo que tenia un perro a tomarnos unos tragos y pensé en proponerle tener un trio con el perro y el, pero me dio vergüenza y es que este es un tema muy serio para muchos. La verdad me interesa mucho conocer personas hombres y mujeres que tengan o quieran tener relación con la zoofilia pues me siento a veces solo y en Costa Rica no hay paginas o comunidades
O tal ves yo no las conozco, bueno me interesa gente en especial hombres maduros de 40 para arriba que quieran conocerme y platicar y que sean de mente abierta , en el sexo soy pasivo 1000% pero igual quiero conocer a mujeres y hombres de todo tipo y por supuesto de Costa Rica .
gracias por darme el espacio de desahogar algo tan hermosos como es el sexo. Espero les haya gustado mi vivencia.